29/9/08

Cánticos (Hooligan Pop Market)




Los fanáticos del fútbol (barrabravas e hinchas fervientes) son personas de temer. Generalmente, suelen ser asociados con el malhumor; escandalosas, indecorosas y ridículas descargas de fin de semana por penurias y desgracias de sus trabajos y familias; aspecto terrible y siempre amenazante; poco amables; irritables; big macho's; poco amistosos; clubes sociales delicitivos relativamente organizados; sementales poco cariñosos que les apetece el sexo anal; voces roncas y disfónicas; portadores de todo tipo de cicatrices de diversas trifulcas y embates de hinchadas; tatuajes tumberos; armas de todo tipo de color; agresivos hasta los dientes; fundamentalistas esquizofrénicos con insignias de la locura y estandartes varios; bengalistas; tres tiros; hombres de pocas pulgas; sucios; borrachos; jonkies; xenófobos; homófobos; misóginos y lo peor de todo, peronistas.

Tipos jodidos, digamos. Pero se ponen mimosos a la hora de uno de sus cánticos predilectos, reversión de uno de los two-hits-wonder del pop. Nada que ver con esos tipos que son rudos hasta el final, esos hooligans británicos del Liverpool que cantan rock 'n roll en un estadio.

Aguanten Los Dogos!

Nick at Nite



Voy a hacer un breve comentario político, algo a lo que no estoy acostumbrado a recurrir en este espacio, pero dada la situación, lo considero necesario. Como ciudadano demócrata que soy, no puedo más que estar decepcionado (espantado AH aterrado) y sentirme estafado tras haber escuchado las últimas declaraciones del hawaiense Barack Hussein Obama Jr., quien dice que sus series favoritas antes de irse al quinto sueño almost presidential son Kenan & Kel y The Fresh Prince of Bel-Air.

27/9/08

Sepelios Wendy Carlos

Activia

El tránsito lento no se puede eludir un viernes por la tarde (casi noche) ante cortes de avenidas, trotes imposibles por microcentro, ataques de vendedores de Hecho en Buenos Aires y demases. Así que me perdí el comienzo de La mujer sin cabeza, primer película que veo en cine desde 2005. Y como recién le comentaba al Señor Cosa por teléfono, tendré que pagar nuevamente la entrada y ver el accidente en la pantalla para luego retirarme tan satisfecho como lo hice ayer (o más). El orden de los factores, jamás altera el producto.

24/9/08

Chenille




Las víctimas se irán reduciendo
lentamente
aunque el incendio se haya extendido,
corra con sus colmillos afilados
en punta
por toda la planta
acorrale operarios
y estrangule normas y políticas.

¡Arde Chenille!

Nadie podría haberlo previsto
no estaba en el imaginario de la factoría:

La estática y el solvente
fueron el foco
desencadenante
el incidente, luego accidente,
como dicen los plumíferos
que habitan los pastos maltrechos
desparejos
del parque industrial:
teros,
caranchos
y en menor proporción,
calandrias.

-La prisa come el alma de los fuertes
en forma voraz,
y las decisiones apresuradas
son un cáncer maligno
que avanza y arrasa
contra todo destello de sensibilidad.

Los débiles
morirán más rápido,
pero a (la condena de) su tiempo
todo será un proceso más lento.

¡Arde Chenille!

Y la invasión de gatas peludas,
como si fuera poco,
tuvo que ser sofocada por los brigadistas
los supervisores y el personal de mantenimiento,
pisada tras pisada
borcegos verdes
pegajosos
húmedos de rocío y baba
con olor a ahumado
por doquier.

La seguridad privada palpará a ellas las lampiñas
cachearán sus cuerpos largos de vesturario femenino
y vomitarán tortillas asadas de la rotonda sobre sus cuerpos
hasta que todo esté controlado
todo esté bajo control.

Largo proceso en Chenille.

Teñir las pastas de esta cena agitada
hilar e hilar
como la nonna hacía en el desvelo de la siesta
del verano sofocante
pero nadie preveía
(salvo el oráculo montado en los rulos de Ronaldo Fabiano de McDonald)
que arderíamos hasta descostillarnos

¡Y la producción!
bendita sean las pérdidas materiales
también
las humanas.*

Y el incendio es plum!

Un plum! que hace neblina
en esos ojos chinescos
retorcidos por el viento que se derrumba
junto a los galpones
y las disonancias de estallidos
de gomas de camiones,
en esa boca seca por la tierra rojiza
que cubre los baches del pavimento
que se fuma todo el campo
de una pitada larga y brusca.



* y la clínica médica soltará a las enfermeras voluptuosas
del cautiverio de sus celdas luctuosas
para que luchen en el fango
y escupan sobre las heridas de primer grado
todo grado
es calor.

23/9/08

Do androids dream of electric sheep?



Sintetizador Telstar



Publicidad de 1979



Anarchic System, "Pop Corn"



Clara Rockmore, "The Swan"



Edgard Varèse, "Poéme électronique"



Pierre Schaeffer, "Étude noire"



Samuel Hoffman, "You asked for it"



The Sonovox, de Kay Kyser



Delia Derbyshire, "Effervescence"



Stockhausen, "Hymnen"



Kraftwerk, "Autobahn"



Robert Moog in memoriam.

Frankie goes to your pillow book



Gracias por la magia travesti Daniel!

I performed in a concert that lasted 18 hours

20/9/08

Aggiornado



Hoy, mi deseo más profundo es ir al Hogar Obrero y comprarme un LCD 26" LG Modelo 26LG30R con quince años de garantía con un control remoto universal.

17/9/08

Mighty Mouse



Del demente de John Kricfalusi, creador de esa asquerosidad que miraba por las noches llamada Ren & Stimpy. Nunca podrán borrar esos recuerdos tan perturbadores. Olorín, cómo sufrí cuando estuviste lejos de casa!

15/9/08

Bailando por un coño



En Buenos Aires asoman los senos gelatinosos de Nazarena Vélez (o de Gaby Bex) y en España se vive la fiesta. La noche feliz parece no tener fin y el electro-pop es el divo exclusivo de turno. Con él todo está permitido y el dj es mejor a la napolitana. Recuerdo casi diez años atrás estar en Big One y la extrañeza que me causaba todo todo. Tan mal no estaba el chiste de Que Out y eso del tonti-pop ahora que lo pienso. Y esa importación de materia precaria española no puede dar mejores resultados: Dirty Princess es el ejemplo de ello. Oh, hermanos hispanos, terminaremos haciéndonos pajillas los unos a los otros como el querido Torrente. Al final, el que queda mejor parado es Dani Umpi.


Leonora Carrington

Aquellas viejas tardes de bajo y sol

Allá por el año 2000 -me recuerda inevitablemente a Los Gatos- en mi año sabático tomé por primera vez clases de bajo. Una vecina le había pasado a mi madre el teléfono de un profesor de música que había tenido en la secundaria y decía que era muy copado; por ende, allí fui.

Iba los sábados a la casa de sus padres en Avellaneda y comencé a trabajar con bastante libertad y poco academicismo. El profesor se llamaba (llama) Hernán Hayet. Trabajábamos en una mesa larga con una batería electrónica y nuestros respectivos bajos diferentes canciones populares; aprendía cuestiones teóricas y algunas experimentales, cuando vio por dónde venía mi interés. A veces aparecían sus padres y me saludaban cariñosamente, o estaba la presencia del gato durmiendo en uno de los sillones, las aves picoteando insectos en el patio trasero. Registrábamos todo en cassettes que escuchaba en casa para practicar y generar canciones propias con la batería del teclado.

Aprendí todo lo que sé del bajo con él y otras tantas cosas. Me prestó cassettes de Screaming Headless Torsos y de Jaco Pastorius. Conocí su bondad infinita, su generosidad y su genio musical. Nunca pude dejar de sentir que era parecido a MacGyver. En aquel entonces iba a verlo a los recitales que hacía con sus bandas que por lo general siempre eran tríos y variaban mínimamente su formación. Algunas veces sonaban en alguna radio. También recuerdo que le había canjeado un pedal que había comprado para mi bajo por clases, aunque se quedó con el pedal y nunca (creo) me cedió las clases pactadas. Me dio algunas lecciones que siguen vigentes en mí, lecciones de vida.

Al otro año seguí yendo pero a la casa que tenía en Caballito y al tiempo deserté, motivado por mi espíritu abandónico. Nos volvimos a ver en algunas ocasiones esporádicas e imprevistas, cuando con Gordöloco Trío ya comenzaba a tener buena difusión y alcance entre los degustadores de jazz experimental. La última oportunidad en que lo ví fue el año pasado en Barraca Vorticista, con motivo de la presentación de un libro de la editorial Carne Argentina. Allí estuvimos Joaco, Chami y yo (en la foto se ven nuestras respectivas cabezas). Y en estos tiempos que corren vuelan y saltimbanqui anduve molestando a los muchachos de Fedro dos fines de semana consecutivos por el disco solista que sacó de cajitas musicales. Los sellos independientes prometen puntos de venta y el comprador va y no acepta noses. En fin, ya llegará a mis manos cuando la divina distribución haga sus honores correspondientes.

13/9/08

Au clair de la lune, mon ami Pierrot




Mandá ALTA ART al 3326 y bajate en tu celuloide lo ÚLTIMO, lo más pulenta en el sudeste para escuchar todo el día y mostrárselo a todos tus amiguitos en el colectivo y quedar guachi-guau jetón, vó quedate piola que suena al mango!

O bajatelo ACÁ, mambrú. Es lo nuevete nuevete del Maestro de la salchicha tropical con salsa golf, Édouard-Léon Scott de Martinville!

7/9/08

Continúa el viaje a través del imaginario industrial

El recuerdo de mi abuelo materno, Norberto Gerónimo, que se acercaba cuando estudiaba o leía líneas de apuntes con la mente volando y repasando fantasías:

-Algún día vas a tener una placa en la puerta de tu casa y los que pasen van a decir ése es el doctor, el nieto de Borzese.*

Lo más cerca que estuve de sentirme doctor era cuando el Meister Bonansinga me llamaba así; complicidad profesional, claro. Y obviamente también lo llamaba así a él. Entre doctores nos entendemos.

Mi padre el inyeniero (diría Incardona), una eminencia en el campo de la química a pesar de que no se le reconozca como tal. La última materia -y única previa que tuve en mi vida- del secundario fue química orgánica; eso fue durante un año muy extraño y complicado lleno de infortunios. Nunca hubiera imaginado que en 2006 comenzaría a trabajar en la Universidad Obrera Tecnológica, o la UTN, como se la llama hoy en día. Menos aún que una semana atrás la dejara para adentrarme en la planta de Florencio Varela de Alpargatas (¡sí, tan ochentoso es el recuerdo!). En fin, ahora me incorporo un poco más a la extraña industria del calzado y textil (entre los miles de cambios que vivió en sus largos años de vida y muerte y contradicciones corporativas) entre conflictos ideológicos, presiones para absorber información y convertirme, Dios quiera que no, en el personaje de Franck. Y así recorrer quinientas millas o más de quinientas millas para llegar al campo en Gutiérrez y sentir el frío de la belleza más desnuda, aún más al sur. Hacia donde siempre quiero ir. Ushuaia, cada vez estás más cerca.




* También decía abogado. Alternaba la profesión según el humor que tuviera.

4/9/08

¡Miren que bien que estoy!




Bicho Bolita (o el amigo Riqui) es un genio.
Tan simple como eso. Un músico de la ostia.

Y es un flaming dibujante en paintbrush.

Escuchad, queridos. Dede NewKen para el cosmos.